En Nueva Delhi, alrededor de 2.000 cristianos de toda la India se reunieron para protestar contra la creciente discriminación y violencia que enfrentan en el país. La concentración formó parte de la “Convención Cristiana Nacional”, que reunió a creyentes de más de 200 denominaciones para alzar una sola voz en defensa de la libertad religiosa.
Según Open Doors, India ocupa actualmente el puesto 11 entre los países donde los cristianos sufren mayor persecución, por encima de naciones como Arabia Saudita y China. El ascenso del nacionalismo religioso ha hecho que ser seguidor de Cristo se vuelva cada vez más peligroso en numerosas regiones. En muchos lugares, los cristianos son vistos como extraños en su propia tierra.
Durante la convención se destacó que, entre 2014 y 2024, los ataques contra cristianos aumentaron en torno a un 500%. Organizaciones como United Christian Forum han documentado que los casos pasaron de poco más de un centenar a más de 800 por año en ese periodo. Aun así, menos de una quinta parte de los incidentes llegan a ser realmente investigados por la policía.
Las agresiones abarcan desde la vandalización de templos hasta golpizas a pastores y líderes de iglesias. Muchos ataques se producen con total impunidad, lo que envía el mensaje de que estas acciones son toleradas. Esta falta de justicia fortalece a los agresores y aumenta el temor entre las comunidades cristianas.
Uno de los puntos más conflictivos es el tema de las conversiones religiosas. Varios estados cuentan con leyes “anti-conversión” que, en teoría, buscan impedir conversiones forzadas, pero en la práctica se usan para frenar a quienes quieren dejar el hinduismo, incluso por decisión propia. Basta el rumor de una “conversión forzada” para que mobs hindúes ataquen iglesias o creyentes, muchas veces sin consecuencias legales.
Los oradores también denunciaron la situación de los dalits cristianos y musulmanes, que no reciben los mismos beneficios que otros dalits. Esta exclusión mantiene a millones en pobreza generacional y crea un incentivo económico para que algunos se vean presionados a volver al hinduismo. La demanda de igualdad para los dalits fue uno de los ejes centrales del encuentro.
ARTÍCULO DE INTERÉS: Corte Suprema de la India ordena la destitución de un teniente cristiano al negarse a adorar ídolos
La convención elaboró un manifiesto para la protección de los cristianos y de todas las personas perseguidas por su fe. El documento incluye llamados a garantizar libertad religiosa, investigar los crímenes de odio y eliminar disposiciones legales discriminatorias. El texto será presentado al primer ministro indio y a otros líderes políticos clave.
Mervyn Thomas, fundador de Christian Solidarity Worldwide, expresó su apoyo a los cristianos indios. Declaró que su organización se une al clamor para que el gobierno de India respete las protecciones constitucionales de libertad de religión, asegure la rendición de cuentas de los agresores y revise las leyes que dañan a las comunidades vulnerables. Sus palabras conectan la lucha local con una preocupación global por la justicia.

